miércoles, 23 de enero de 2013

¿Qué será, será...?

Los aficionados del Bradford en Villa Park // The Telegraph & Argus

Así de felices y orgullosos lucían anoche los aficionados del Bradford City en el estadio del Aston Villa. Sus muchachos, que ocupan la décima posición de la League Two (cuarta división), estaban eliminando a los Villians en su mismo estadio.

El 3-1 de la ida, junto con la pobre campaña que están realizando los de Birmingham, hacía soñar a los aficionados del Bradford. Pero los discípulos de Paul Lambert salieron con todo desde el inicio. Encerraron a los visitantes en su propia área y a los 23 minutos de juego, Benteke adelantaba al conjunto de la Premier. La remontada parecía factible. Tras múltiples ocasiones, daba la sensación de que el segundo gol podía llegar en cualquier instante, en cualquier jugada. Pero los jugadores del Bradford aguantaron estoicamente la primera parte.

Al descanso, twitter daba la notícia de que el Bradford City seguía aguantando, aunque muchísimos augurábamos una remontada del Aston Villa.


Comenzó la segunda parte y los visitantes se deshacían poco a poco de esa presión asfixiante a la que habían sido sometidos en la primera mitad. Poco a poco comenzaron a enlazar varios pases seguidos. Se sucedieron algunos contraataques, provocaron algunos córners. Y en uno de estos, en el minuto 55. James Hanson se adelantaba a toda la defensa para llevar el balón al fondo de las mallas de un fuerte cabezazo, y el delirio a los aficionados del Bradford desplazados a Villa Park y a los que se agolpaban frente al televisor en los pubs de la ciudad de Yorkshire. 4-2 en el global de la eliminatoria.
Rory McArdle celebra un gol en la ida // Craig Brough, Action Images

Duro golpe para el Aston Villa, que veía cómo pasaban los minutos y se devanecía toda opción de plantarse en la final de la copa de la liga. Los aficionados del Bradford se lo fueron creyendo, después de una primera parte en la que se veían más fuera que dentro de la final. Sí, sí, FINAL. El Bradford iba a volver a una final... ¡102 años después! ¡Wembley les estaba esperando!

En 1911 los Bantams ganaron la FA Cup, su único título hasta el momento, 1-0 ante el Newcastle. Siempre ha participado en las divisiones inferiores del football inglés, aunque jugó dos temporadas en la Premier League, 99-00 y 00-01. Tras cada ascenso, el estadio Valley Parade era remodelado, aumentando de tamaño después de que el 11 de Mayo de 1985, en el último partido de liga, las llamas destruyeran totalmente la grada principal en tan sólo nueve minutos. Matando a 56 aficionados y ocasionando lesiones a 265. Es por este fatal acontecimiento por el que el club decidió llevar pantalones de color negro, aunque esta temporada llevan un pequeño lazo oscuro en la parte posterior de la camiseta. Justo encima del nombre de cada jugador. El estadio lo fueron remodelando y aumentando de tamaño según han ido ascendiendo de categoría.

Otro detalle que llama la atención es que es el único club profesional inglés que viste claret and amber (burdeos y ámbar). Si alguna vez os pasáis por allí, no se os ocurra nombrar de otra fora los colores del club. La marca deportiva Asics diseñó su equipación para jugar en la Premier League y la nombraron burgundi y dorado, recibiendo así una gran cantidad de quejas de una parte de la afición. Estos colores los heredaron del club de rugby del que descienden, el Manningham.

Valley Parade en llamas // Vavel.com
Los aficionados del Bradford celebraban ya la histórica clasificación, cuando en el minuto 89, Weimann adelantaba al Aston Villa en el marcador y el ábitro añadió cuatro minutos más a la eliminatoria. Nervios, miedo... Un gol más de los de Birmingham y habría que ir a la prórroga. Sí, ya habían logrado algo increíble al estar en semifinales, pero una vez se llega ahí, hay que intentar vencer. Nunca se sabe cuándo se volverá a repetir un momento así, una temporada como esta.

Pasaron los cuatro minutos y el partido finalizó. La grada ocupada por los aficionados del Bradford estalló de alegría, los jugadores corrían por el campo abrazándose, el banquillo saltó al césped, todos a una.

En la final se encontrarán o al Swansea o al gran Chelsea. Los galeses, que ganaron 0-2 en Stamford Bridge, ven aquí su oportunidad de jugar competición europea la temporada que viene.  Esta noche sabremos el desenlace de esta otra apasionante semifinal, pero volvamos a anoche, volvamos a Villa Park. Acordémonos de los aficionados del Bradford. No es fácil ver como tu equipo está en medio de la nada en cuarta división, pero las competiciones de copa traen estos momentos. El football es tan hermoso gracias a estos momentos, a estas historias. Hoy muchos habrán ido a trabajar con la camiseta o la bufanda de su club bajo el uniforme. Hoy en Bradford retumba los ecos de la canción que anoche cantaban enVilla Park y que se ha convertido en todo un himno del football inglés... ¿Qué será, será...? Whatever will be, will be... We're going to Wembley, ¿Qué será, será...?

Parece impensable que puedan alzarse con el título, ya que tanto el Swanse como el Chelsea son bastante superiores, pero despues de haber eliminado entre otros a Wigan y a Arsenal, pero con este Bradford y con el football en general, nunca se sabe.

Los jugadores celebran la clasificación en los vestuarios del Villa Park // Twitter CapitalOne